Pensiones de jubilados
amortiguan el paro
Según la cadena de noticias RT un 30% de las familias en
España se mantienen solo gracias a las pensiones de los jubilados. Aunque la
agrupación familiar permite amortiguar los efectos de la crisis, la calidad de
vida de las personas mayores se ha deteriorado
Una
pensión de 670 euros para seis personas. Ese es el único ingreso de María
Jesús, una pensionista española que debe afrontar los gastos más básicos de su
familia con esa suma de dinero.
"Esto es imposible", afirmó la mujer a RT.
"Esto es imposible", afirmó la mujer a RT.
Su
hija, su yerno y su nieto regresaron al pueblo desde Madrid en busca de trabajo. Dos años y medio después
siguen sin empleo. Tuvieron que entregar su casa y sobreviven con las pensiones
de su madre y su tía.
"Es duro, es muy duro y sobre todo cuando se levanta la mujer y te dice
'no tenemos para comprar' o 'hay que pagar el recibo'", lamenta Raúl
Gutiérrez, el yerno de María Jesús.
Las pensiones mínimas en el país son de menos de 500 euros al mes, una cantidad
que para muchas familias no es suficiente como para cubrir los gastos básicos.
"Lo que más demandan ahora mismo son alimentos básicos, leche, aceite,
galletas; un poco lo que nosotros les podemos ir dando para subsistir durante
15 días", señala Loli Morquecho, responsable del Área de Intervención
Social de Cruz Roja España.
Peor calidad de vida
Según
el Consejo Económico y Social, 420.000 familias viven gracias a las pensiones
de los mayores. La red familiar ha sido fundamental durante en estos ya cinco
años de crisis económica para servir de apoyo a los menos afortunados. Sin
embargo, los trabajadores sociales advierten que se trata de una red cada vez
más débil y que la calidad de vida de los mayores se está deteriorando cada vez
más. A esto se suma también el daño psicológico por un proyecto de vida
truncado y, en ocasiones, el riesgo de ser desahuciados.
Además, el secretario de Estado de Seguridad Social, Tomás Burgos, reiteró recientemente que no retirará el índice de revalorización que entrará en vigor el próximo 1 de enero de 2014, una reforma demandada por los sindicatos del país.
"El sistema de pensiones en la crisis está teniendo un papel social fundamental y debilitar eso lo que hace es agravar las consecuencias de la crisis y venir a sumar [a la misma] a otro gran colectivo", dijo el secretario de Protección Social y Políticas Públicas del sindicato Comisiones Obreras, Carlos Bravo, quien enfatizó que existen 630.000 hogares (más de un millón de personas) que "no tienen ningún ingreso, ni pensiones".
Según Jacob Serfaty, de la Junta Directiva de la Unión Democrática de Pensionistas, existen muchos tipos de pensiones, pero unos cuatro millones de personas cobran una pensión "muy ajustada a lo que sería una vida digna".